Carta de cervezas

• DUCHESSE DE BOURGOGNE / FLANDERS RED ALE
• Temperatura de degustación:
  6º-8º
• Notas:
  La duquesa de Borgoña, María de Borgoña, fue una figura muy importante y querida en Flandes Occidental. Habiendo nacido en Bruselas y luego casándose con Maximiliano I, la duquesa de Borgoña parece ser una buena elección de nombre para una cerveza rica y bien elaborada. Fue muy poderosa y muy importante para esa región, otorgó muchos derechos a los civiles de las ciudades y apoyó las actividades comerciales en su tiempo, incluida la elaboración de cerveza.
  
  La cerveza “ale roja” se elabora casi exclusivamente en el oeste de la región de Flandes.
  Esa especialidad regional se caracteriza por un reposo de 18 meses en barricas de roble. Después de estos 18 meses se mezcla la cerveza vieja (muy seca) con cerveza joven más dulce, lo que explica el sabor agridulce y sus aromas abundantes que recuerdan al roble.

Historia

"Brouwerij Verhaeghe-Vichte" es una pequeña empresa familiar en el sur de Flandes Occidental, cuya historia se remonta a 1885.

EL COMIENZO
De Brouwerij fue fundada por Adolphe y Paul Verhaeghe como una cervecería-maltería. En el período anterior a la guerra, la Cervecería fue testigo de una gran actividad. La actividad de ventas de las cervecerías estándar de entonces a menudo se limitaba a la región circundante o incluso, en algunos casos, solo al nivel de la aldea. Visto de esta manera, se puede decir que el "Brouwerij Verhaeghe Vichte" exportaba en ese momento, aunque fuera una exportación regional.

De hecho, Polkes tonnenbier, como se llamaba popularmente a las cervezas del cervecero-cofundador Paul Verhaeghe, fueron elogiadas por su gran calidad, incluso después del transporte: una cualidad que los clientes de Bruselas apreciaban. Debido a la mala infraestructura vial de la época y las limitadas opciones de transporte, que en muchos casos solo se podían realizar con caballos y carretas, no obstante y a pesar de que Bruselas estaba muy lejos de Vichte, la ubicación de la cervecería en las inmediaciones de la línea ferroviaria a Bruselas, permitió a la cervecería construir una base de clientes nada desdeñable.

LAS GUERRAS MUNDIALES
El exitoso ascenso en los primeros años de existencia de la “Brouwerij Verhaeghe-Vichte” se vio paralizado por el estallido de la Primera Guerra Mundial. Los alemanes respondieron rápidamente a la negativa de Paul Verhaeghe a elaborar cerveza para la potencia ocupante con el desmantelamiento de las instalaciones de la cervecería, especialmente valoradas debido a la gran cantidad de cobre para la producción de municiones de guerra.

Después de la guerra, se renovaron las instalaciones y se reanudó la elaboración de cerveza. Se buscó nuevamente a los clientes de Bruselas que no necesariamente pudieron ser abastecidos durante la guerra, pero fue difícil reanudar las relaciones comerciales de antes de la guerra.

Se organizaron aún más las ventas en el mercado local. En la década de 1920, se puso de moda la venta de cerveza embotellada. Se compraron máquinas embotelladoras, así como cuatro pequeñas plantas embotelladoras en un radio de 15 km alrededor de Vichte. Se puso en marcha el proyecto de una sección de limonada, pero pronto se abandonó.

Durante la Segunda Guerra Mundial, las actividades se redujeron al mínimo debido a las restricciones de la potencia ocupante. Debido a la escasez de cebada, solo se podía elaborar cerveza de mesa: la llamada "zéro-huit", que hace referencia a la baja graduación alcohólica de 0,8% vol.
Después del final de la Segunda Guerra Mundial, el sector cervecero cobró impulso. La cerveza tipo Pilsener, una cerveza fermentada, hizo su irrupción definitiva en el mercado belga.

Este avance marcó el final de muchas cervecerías que hasta entonces solo elaboraban cervezas de alta fermentación. La interacción de los avances tecnológicos en la industria, el cambio en el gusto, los estándares de vida más altos, la mejora en la infraestructura vial y el aumento de la movilidad llevaron a la industria cervecera a la fase de consumo masivo. Muchas cervecerías con reconocimiento de marca nacional tuvieron su mayor auge durante este período.

"Brouwerij Verhaeghe-Vichte", que había estado elaborando cerveza lager durante algún tiempo, prestó especial atención a mejorar la calidad de sus cervezas existentes y a la creación de cervezas de mayor calidad. Siguieron las nominaciones en concursos internacionales: los primeros premios fueron otorgados por sus cervezas "Vichtenaar" y "Echt Kriekenbier".

No solo en Bélgica, sino también más allá de las fronteras nacionales, los consumidores aprecian cada vez más las cervezas de calidad con un sabor personal y claramente reconocible. El auge de la cerveza de fermentación mixta "Duchesse de Bourgogne", una cerveza flamenca de color rojo rubí y marrón rojizo envejecida en barricas de roble y elaborada según un método de elaboración tradicional típico del sur de Flandes Occidental, es prueba viviente de ello.

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